Fecha : 24/06/2011

El plástico d2w® es biodegradable

Symphony Environmental Ltd, es la única empresa pública en el mundo que se dedica a la oxo-biodegradación del plástico. Hoy en día sus productos identificados con la gotita d2w® están en más de 95 países del mundo. En cada país, la tecnología ha pasado por procesos de validación acordes a legislaciones y científicos locales. A través de numerosos tests, que están a disposición, ha comprobado que la oxo-biodegradación es una realidad. Los procesos de fragmentación generados por la oxidación, pérdida de peso molecular hasta niveles que los componentes producidos ya no son plástico y su disponibilidad para ser consumidos por organismos vivos, son sólo parte de los resultados de los análisis efectuados con el d2w®. Paralelamente se ha analizado su inocuidad en el medio ambiente y su compatibilidad para uso en contacto con alimentos según las normativas europeas, americanas, brasileñas, etc.

La degradación, “Implica la ruptura de la cadena polimérica por acción de diversos factores, como luz solar, calor, oxígeno e inclusive rotura mecánica”. Esta es la primera fase del proceso que sufren los plásticos oxo-biodegradables d2w®.

Durante la degradación, se produce una disminución periódica y sostenida del peso molecular del plástico para finalmente convertirlo en intermediarios químicos (es decir, el plástico deja de ser plástico). Este nuevo material es totalmente susceptible de ser biodegradado por microorganismos, lo que genera una reintegración inocua a la naturaleza. Es en esta etapa donde se comienza la biodegradación como: “acción de microorganismos que consumen el material”.

La reducción del peso molecular del plástico es completamente comprobable y es un proceso que no se detiene, por lo que el concepto de “oxo-fragmentable” se vuelve inválido. La etapa de fragmentación es la etapa de la pérdida de propiedades, pero es progresiva y no estática. Los fragmentos no dejan de fragmentarse y cuando alcanzan un tamaño menor a 40.000 Dalton, estas moléculas son susceptibles de absorber agua y ser procesadas por microorganismos.
Los plásticos oxo-biodegradables d2w®, a diferencia de los plásticos compostables, no fueron diseñados para ser compostados de acuerdo a la norma EN13432. Tampoco cumplen con el plazo que pide esta norma de “desaparecer” en 180 días.

Los productos oxo-biodegradables cumplen con la nueva norma BSI 8472. Es la única norma en Europa que define los criterios que un producto plástico debe cumplir para que sea considerado biodegradable en la naturaleza. Es una garantía real de biodegradabilidad. Ser compostable no es una garantía de biodegradación: por ejemplo el PLA es compostable pero no biodegradable en la naturaleza.

Un material que se biodegrade en 180 días o menos, aporta al aumento de los gases de efecto invernadero. Estas normas requieren que el plástico libere el 90% del dióxido de carbono contenido en él en 180 días. Es decir, se produce una gran liberación de dióxido de carbono en el medio ambiente muy rápidamente, lo que no permite la asimilación de este compuesto en la naturaleza y se acumula en la atmósfera. Además, la descomposición de estos plásticos en ambientes anaeróbicos genera gas metano, 20 veces más nocivo que el dióxido de carbono.

Reciclabilidad

Los plásticos oxo-biodegradables d2w® SI son reciclables., El producto final reciclado sólo será oxo-biodegradable si se vuelve a agregar el aditivo d2w®. Si van a un relleno sanitario se biodegradarán en tanto haya oxígeno presente, en caso contrario, se mantendrán inertes al igual que el plástico tradicional. Los “bioplásticos”, por su parte, no son reciclables. Si se incorporan al reciclaje tradicional, lo contaminan. Por tanto, se vuelve necesario separarlos del plástico convencional, lo cual es un proceso difícil y costoso.

Los “bioplásticos” requieren ser compostados. De lo contrario se comportarán como un plástico tradicional. Su compostaje requiere de plantas industriales donde se controlen todos los elementos del ambiente donde se está llevando a cabo el proceso. Estas plantas son escasas, incluso a nivel mundial. Esto significa que, a su alto costo de producción (3 veces mayor al del plástico tradicional), se suman costos de recolección, procesado y enterrado para que se reintegren al medio ambiente.

La gran ventaja de los plásticos oxo-biodegradables d2w® es que complementan las gestiones de manejo de los residuos que no pueden ser recolectados y por lo tanto reciclados, facilitando su reincorporación inocua al medio ambiente.

Web site BSI: Pulse aquí

Video de bolsa plástica con d2w® degradándose: Pulse aquí